Top 10 palabras similares o sinónimos de depreciándose

macutas    0.633068

devaluándose    0.595084

explotándose    0.574532

rubles    0.572456

pysa    0.571746

roepiah    0.557997

kwd    0.550405

didracma    0.549111

cêntimos    0.547283

dalasi    0.546305

Top 30 palabras análogas o sinónimos de depreciándose

Article Example
Akçe En 1454, Mehmed II introdujo una nueva unidad, el altun con un valor de 60 akçe. Hacia 1700, valía entre 300 y 400 akçe. Con la reforma monetaria de Ahmed III (1703-1730), un akçe pasó a valer 3 "para", y en 1800, apenas 0,1 "para". El akçe continuó depreciándose, hasta llegar a contener sólo 0,1 g de plata. Fue retirada de circulación durante el sultanato de Mahmud II (1808-1839).
República Conservadora (Argentina) El país estaba sometido a los efectos de la crisis: los ingresos fiscales apenas alcanzaban el 70 % respecto a años anteriores, los bancos ―los que no habían quebrado, que habían sido varios― paralizados, y la moneda continuaba depreciándose. Las primeras medidas fueron destinadas a paliar la situación fiscal: encargó a un grupo de hombres de negocios suscribir un empréstito por 15 millones de pesos, y enseguida envió a Victorino de la Plaza a Londres, a renegociar los términos y vencimiento de la deuda pública; apenas logró una moratoria de la Banca Rothschild.
Johann Schober El principal problema al que tuvo que enfrentarse, no obstante, fue el económico: el país sufría una honda crisis, con una gran inflación, una divisa devaluada, escasas exportaciones, falta de alimentos y materias primas y un comercio exterior con los países vecinos aún inestable. Para tratar de mejorar la situación mientras se lograban los ansiados créditos de estabilización, el gabinete aprobó una serie de medidas. En julio de 1921, subió varios impuestos, para reducir el gran déficit presupuestario, que se calculaba en más del total de ingresos. No pudo impedir, empero, que continuase depreciándose la corona y aumentando rápidamente la inflación. El Gobierno siguió tratando de reducir sus gastos, pero la mitad de estos eran subsidios para garantizar la alimentación de la población a precios asequibles.
Sucre ecuatoriano El patrón intercambio-oro fue suspendido el . Los controles de cambio fueron adoptados el 30 de abril y la tasa oficial fue fijada en 5,95 (compra) por dólar estadounidense. Después el precio de plata subió más allá del valor nominal de la mayoría de monedas de plata en la década de 1930, Ecuador embargó la exportación de plata (17 de mayo de 1935). Esto fue seguido por numerosos ajustes al sistema de cambio de divisas pese a lo que el sucre siguió depreciándose. Los controles de divisas, finalmente se levantaron en septiembre de 1937 y el tipo de cambio oficial se fijó en el 13,5 sucres por dólar americano. El sucre se devaluó a 14,77 sucres por dólar el 4 de junio de 1940 y se volvieron a imponer controles de cambio. El tipo de cambio oficial se convirtió en 14 en 1942 y 13,5 en 1944.
Yuan Shikai Yuan reservó para sus partidarios los principales ministerios, como el de Finanzas y Defensa, adjudicando a los revolucionarios solo los puestos de menor importancia del gabinete. La república se encontraba en la bancarrota y abundaban las tropas que ni el Gobierno central ni las provincias podían mantener. La impresión de papel moneda para mantener los gastos gubernamentales llevó a la devaluación de la moneda. No solo el Gobierno pequinés imprimía moneda, también lo hacían algunas provincias, sin aval alguno. La primera preocupación del Gobierno fue, por tanto, lograr un crédito internacional para reflotar la economía. El primer crédito que evitó la declaración de bancarrota se logró en el otoño de 1912. Aun así la situación interna era grave: los gobernadores militares de las provincias mantenían su desprecio por el Gobierno central y continuaban con sus emisiones de moneda, que siguió depreciándose. El Gobierno central apenas recibía ingresos de las provincias y dependía de los impuestos que recaudaban las potencias extranjeras, que resultaban insuficientes para sufragar los gastos. Las provincias gozaban de amplia autonomía de hecho, gestionaban sus ingresos y mantenían sus propias tropas, aunque generalmente evitaban enfrentarse directamente con el Gobierno nacional.